El mítico Jorge Pimentel, fundador del movimiento poético Hora Zero, nos habla del oficio del poeta y nos lee un poema inédito. Francisca Vidal nos envía su poema “Autorretrato” que analizaremos acuciosamente. La anécdota Ruculista recrea el duelo poético de Jorge Pimentel con Antonio Cisneros.
Poesíasinvergüenza
Autorretrato
Un día me comí mis ojos, y la boca
y la nariz, y también me comí las cienes
para que este dolor de cabeza dejara de
atacarme cada noche y cada tarde
este dolor puntiagudo que se ha presentado sin falta
a la puerta de mi casa desde que estoy vieja
este dolor ingrato que se me pega a los huesos astillados
y me hace aferrarme con uñas y dientes a lo poco que me queda
de juventud
pero las uñas y los dientes también he tenido que comérmelos
porque están arrugados y azulados
pero no azulados por el frío sino por los años
que llevo sobremuriendo entre las casas y las carreteras
y los departamentos de los amigos y las facultades y las oficinas
Un día me comí mis ojos, y la boca
también me tragué la nariz y las cienes
pero tuve que hacerlo
porque tuve que sacarme la piel para saber que aún me quedaba
sangre,
y los tigres de mi sangre y los perros de mi sangre me
sostuvieron la cabeza y la extirparon del envase vacío que es
mi cuerpo.
Tuvieron que hacerlo para hacerme saber que sigo aquí
y que ya no construyo, ni recuerdo, ni insisto
que ahora solamente aguanto.
Francisca Vidal Gajardo – Chile